Finanzas personales
Educación

5 Trucos de finanzas personales que deberías aplicar para mejorar

A principios del S. XX Albert Einstein decía que la vida es una preparación para el futuro; y la mejor preparación para el futuro es vivir como si no hubiera ninguno. Y en cierta manera esto es cierto, pero si hablamos de finanzas personales, no.

En donde crecí, y durante mucho tiempo, tuve la oportunidad de ganar el mismo dinero trabajando en 5 meses que el que otra persona ganaría en todo un año. Vivía en un lugar turístico llamado Formentera y trabajaba de camarero prácticamente 12 horas al día a turno partido casi sin tiempo para disfrutar de sus playas y ocio nocturno. Al terminar la temporada turística, y después de acabar la universidad, derroché todo el dinero que había ganado en cuestión de 3 meses: me compré un coche modesto de segunda mano y con ese coche y mi perra me fui de viaje a Italia y Francia durante casi un mes parando por un montón de ciudades, comiendo en buenos (y caros) restaurantes y derrochando el dinero sin pensar en que al volver me haría falta dinero para vivir el resto del invierno. La experiencia no me la quita nadie, pero los malabares que tuve que hacer para subsistir después, tampoco lo olvido.

Einstein tenía razón. Pero repito, que en finanzas personales, esto no debe ser así.

Salir de fiesta cada fin de semana, comer fuera más de lo debido, comprar objetos que no necesitamos… todo esto supone un gasto anual importante. El «vive el ahora» se acabó convirtiendo en una pesadilla, porque vives tan atrapado en él que ya el escaso dinero extra que te queda, si te queda, no te deja margen de maniobra para vivir una vida más rica en libertad.

Por eso hoy quería escribir una serie de consejos para ayudar a mejorar nuestras finanzas personales:

1) No gastar más de lo que ganas

Mensualmente tienes un ingreso. Algunas veces fijo, si trabajas por cuenta ajena; otras puede variar mes a mes, si lo haces por cuenta propia. Si sabes cuanto ganas, ya vas bien encaminado. Los gastos fijos suelen ser casi siempre los mismos: alquiler, internet, facturas de servicios, transporte, comida… y otros gastos variables de diversa índole como impuestos. Mi recomendación es que si no sabes a ciencia cierta este dato, te pares y lo calcules inmediatamente. La APP de tu banco, casi seguro, dispone de una herramienta para dividir los gastos según su categoría y así ver en que se nos ha ido el dinero este mes.

¿No gastar más de lo que ganas? Parece fácil, pero a veces no lo es tanto. Si no controlas tus impulsos, ellos te controlarán a ti y a tu cartera y los gastos que superen tus ingresos se llaman DEUDA. Y la deuda por definición es mala y tóxica. Lo es porque es como el pez que se muerde la cola: ganas para pagar deudas, y te endeudas para pagar después algo más. ¡Nene, caca! Y por si fuera poco, la deuda conlleva intereses, lo que te hace acabar pagando más de lo que pediste prestado. Huye de la deuda y págala cuanto antes si ya la tienes.

2) Ahorra e invierte

Se entiende como ahorro a la parte del ingreso que no se destina al gasto y que se reserva para necesidades futuras. El ahorro es importante, entre otras cosas, para cuando no tengas ingresos regulares (cuando te jubiles o dejes de trabajar por enfermedad si eres autónomo) dispongas de un extra que complemente una hipotética pensión del gobierno o un seguro de enfermedad o accidentes …

A medida que escribo esto me doy todavía más cuenta de lo importante de ahorrar …

Fíjate unos objetivos de ahorro, da igual si es una cantidad pequeña. Idealmente debería seguir la regla del 50/20/30: 50% de tus ingresos a gastos básicos, 30% a gasto prescindibles y un 20% de ahorro.

Si 20% es alto para ti, págate a ti mismo el primer día del mes al menos el 10%.

Pero no todo es ahorrar y ahorrar. Si tenemos en cuenta el impuesto de los pobres (la inflación), tener este dinero quieto debajo del colchón o en una cuenta corriente de banco (con los pertinentes «gastos de mantenimiento») es un suicidio económico. Un consejo puede ser tener una parte en una cuenta de ahorro con altos intereses (difícil ahora en tiempos de pandemia) y otra parte invertirla en bienes raíces, en crear una fuente de ingresos extra o negocio o en la bolsa (renta variable). Los frutos se verán a medio o largo plazo, y mientras antes comiences a hacerlo, más lo agradecerás después.

3) Edúcate

Si está leyendo este blog significa que te interesa la educación financiera. Muy bien por ti. Te animo a continuar formándote, con nosotros o con otros muchos sitios de que hablan de educación financiera de forma gratuita. Tomarte el tiempo para aprender de educación financiera es primordial para continuar avanzando en tu camino de aprendizaje. Hazlo a menudo, cada semana un par de horas, lee libros, revistas, blogs de finanzas, videos de autoayuda y crecimiento personal. Esto te dará confianza en tus capacidades de administración de tu dinero.

4) Reduce tus micro-gastos al máximo

Netflix, Amazon Prime, HBO, Disney Plus, DAZN, Apple TV, YouTube Music, Spotify, PSN Network … ¿Tienes contratada la mensualidad de más de 2 de estas plataformas? Si la respuesta es que si, te invito a que calcules cuanto te cuesta esto al año.

Espero que no te hayas desmayado y todavía sigas allí leyendo.

Estos microgastos, muchos de ellos prescindibles, silenciosamente y con el enganche de «PRIMER MES GRATIS» (solo introduce los datos de tu tarjeta bancaria y cancelar, si te acuerdas, antes del mes de prueba)» van reduciendo los fondos de tu cuenta mes a mes sin que casi lo notes.

Vale, a mí también me gusta ver una buena peli de vez en cuando, pero algo que hago a menudo es cancelar mis subscripciones e ir alternando según me interese el contenido que ofrezcan mes a mes. Nada de pagar mes a mes para tener siempre las mismas películas de siempre.

Y lo típico, ese café mañanero, mejor tómatelo en tu casa o prepáralo y llévalo en un termo.

Hay ricos en placeres materiales pero pobres en patrimonio. Y ricos pobres en caprichos desmesurados, pero con unas finanzas personales férreas

5) Planifica tu alimentación semanal

¿Cuántas veces no has vuelto del supermercado sin casi nada bueno para comer? Patatas fritas, galletas pizzas, chocolate, bebidas gaseosas o bebidas alcohólicas, etc. Para luego tener que volver a mitad de semana porque no «hay nada en la nevera». ¿Te suena de algo?

Planificar tu alimentación no solo será beneficioso para tu cartera, también lo será para tu salud y te dejará más tiempo para ocuparlo en otras cosas. Lunes de pasta, martes de pollo y ensalada, miércoles de pescado, jueves de lentejas con verdura… y más, todo dependiendo de tu dieta, pero siempre manteniendo una alimentación equilibrada. Puede sonar ridículo, pero estas pequeñas cosas son las que hacen diferencia poco a poco en nuestra forma de vida.

6) Huye de las rebajas y los descuentos

Según un estudio realizado en 2016, de media los productos en oferta aumenta su valor entre un 4% y un 17% semanas previas a las rebajas. Los que más aumentan son los productos de tecnología, seguidos de los productos necesarios para «la vuelta al cole como mochilas.

Muchos comerciantes ven las rebajas como una oportunidad para vender productos hinchados de precio a los que simplemente le ponen una pegatina de ¡¡OFERTA!!, cuando en realidad el precio es el mismo, o incluso más caro. Todas estas prácticas suponen un fraude en el que no vamos a entrar a discutir pero si debemos conocer para estar alerta.

Extensiones para nuestro navegador como «KEEPA» nos ayuda a comprobar el historial de precios en Amazon para comprobar alteraciones indebidas en los precios, en el caso de que compremos online. Existen muchas otras para Ebay, o Aliexpress.

Piensa bien antes de comprar si realmente necesitas ese soporte para leer con una sola mano o esas luces para el inodoro… no solo no lo necesitas, si no lo más seguro es que acabes pagando más de lo que cuesta y con el tiempo lo dejes de usar, o se rompa. Compra con sentido común, y si de verdad necesitas algo, compara precios y no te dejes engañar por ese cartel grande y luminoso que anuncia grandes descuentos.


Todos estos consejos, y muchos otros pueden ayudar a mejorar nuestras finanzas personales.

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